Corre el año 1236 y Córdoba acaba de ser conquistada por Fernando III, el Santo. El monarca recorre la ciudad acompañado de su séquito y sus consejeros, supervisando la transformación de la antigua medina islámica en una urbe cristiana. A su paso, ordenará la construcción de las iglesias fernandinas, templos que marcarán el inicio de una nueva etapa en la historia de la ciudad.
A través de esta ruta teatralizada, acompañaremos al rey en su visita a los distintos barrios, donde recibirá a clérigos, artesanos y pobladores que le mostrarán sus inquietudes y anhelos. Descubriremos la importancia de templos como San Lorenzo, San Pablo, San Pedro o Santa Marina, así como las huellas del pasado andalusí que aún perduran en su arquitectura.
El recorrido estará lleno de escenas dramatizadas, donde el público podrá participar en los momentos clave de este proceso de cambio: desde la conversión de mezquitas en iglesias hasta la llegada de nuevos pobladores cristianos y el establecimiento de las órdenes religiosas en la ciudad