Más de 200 obras componen la muestra entre cuadros y esculturas, incluyendo 27 piezas de la colección municipal y el mural pintado por los artistas participantes con el que se inicia la exposición. También incluye varias intervenciones artísticas de los artistas in situ y con una zona en la que podremos ver obras que reaccionen a la luz negra.
Gejo, Juan Francisco Gállego, Delfín Ortíz, Susana Modrego e Ionut Boruian han convertido la sala de exposiciones en un salón del siglo XVIII, donde se muestran sus creaciones con muros enriquecidos totalmente con sus obras. Las piezas van de la pura abstracción al arte urbano y la figuración más arriesgada. Esta mezcla de estilos y materiales involucra también a creadores consagrados, ya que su arte dialoga con una selección de la colección municipal del Ayuntamiento de Zaragoza. Las obras han servido de inspiración para muchos y demuestra la importancia que se le da al arte en nuestra ciudad.
En su parte final, los murales e intervenciones de estas "fieras" (retomando el apelativo que el crítico de arte Louis Vauxcelles dio a figuras como Matisse o Derain) da paso a un grupo de artistas invitados por el quinteto principal: Josan Villuendas, Manuel Blanco, Andy Amanece y Bertrand Grave. De esta manera, se unen a la exposición para mostrar sus creaciones y formar parte del bestiario que el comisario de la exposición, Fernando Serrano, ha creado en colaboración con sus protagonistas.